Esta semana estuvo mucho más cuántica que la anterior, en gran parte por el magnífico libro que leí. El cual me permitió tener un mayor entendimiento de ciertos conceptos que se me dificultan bastante y, como siempre, eso me permitió aplicar analogías inversas a mi vida. Aun recuerdo su risa cuando usaba analogías complejas para explicar cuestiones simples… Era lindo explicar emociones en términos cuánticos…
Día 288. 17 de junio de 2021
Tuve una noche bastante difícil, me costó dormir, ciertas conversaciones al final del día creo que influyeron. Me desperté cerca de las cero trescientas cuarenta horas y me costó mucho volver a descansar, estuve durmiendo y despertando. Me levanté hasta las cero quinientas cuarenta y cinco horas.
Mi HRV está mejorando bastante, incluso mi desequilibrio hoy fue hacia el sistema nervioso parasimpático. Pero durante el primer ejercicio de respiración nuevamente llegó el llanto. Esto de indagar en las razones de las personas es interesante, pero en este momento sólo siento una profunda decepción. Sólo unas pocas han respondido a la pregunta, pero todas ha respondido “porque pensé que estabas enojado”. El mundo no puede estar equivocado. Me queda claro que no soy alguien con quien valga la pena hablar.
En el trabajo sigo bloqueado por los cambios de Shanghái. Mientras comencé a estudiar un nuevo API que tengo que incorporar a uno de mis servicios.
Por la tarde ocurrió una situación con uno de los colibríes. Curiosamente, fue el macho. Dejé el balcón abierto porque tenía calor y suelo subir todas las persianas para que no estén golpeando con el aire. El colibrí voló dentro del departamento y chocó con uno de los vidrios que no se mueve. Como no lo ve, no podía salir de nuevo. Entonces tuve que bajar la persiana con mucho cuidado para que viera que no podía pasar y entonces ya voló hacia donde sí podía ver y pasar. De ahora en adelante dejaré las persianas abajo cuando deje abierto el balcón.
Este evento me hizo pensar en la experiencia del colibrí al intentar volar. Él no ve el vidrio, pero siente una especie de fuerza que le impide avanzar hacia donde su cerebro le dice que debería estar avanzando. Técnicamente, es la fuerza electromagnética que se genera entre los electrones que conforman los átomos del colibrí y los electrones que conforman los átomos del vidrio. Eso me lleva a hacerme muchas preguntas. Si hubiera colibríes científicos, ¿cómo serían sus experimentos para determinar las propiedades de esa fuerza invisible que les impide volar hacia donde ellos quieren?
Día 289. 18 de junio de 2021
Creo que esta ha sido la noche que más he dormido durante este protocolo, seis horas y veintiocho minutos. Eso tuve un impacto positivo, mi MR fue de diez con un balance casi idea, sólo un par de pasas hacia el sistema nervioso simpático, mi HRV no fue tan alto como ayer, pero ya estoy manejando mejores niveles y, de algún modo, más homogéneos. Este ejercicio de conectar con mis factores estresantes y abrazarlos, realmente está resultando bastante útil.
Ya puedo identificar ese dolor físico en mi corazón cada vez que abrazo mis factores estresantes, y eso me permite enseñarle a mi corazón como reaccionar cuando ese dolor físico se presenta. Todo este conocimiento y esta nueva habilidad que estoy desarrollando tiene bastante potencial táctico.
También he continuado con mi investigación sobre el libre albedrío y por he seguido haciendo la siguiente pregunta a las personas “¿Por qué decidiste dejarme de hablar?”. La pregunta esta formulada de esa forma por una razón específica.
Hoy mientras observaba a los colibríes, una hembra, por un instante, voló frente a mí y hasta parecía que me estaba observando. Simplemente presioné el disparador remoto de la cámara, afortunadamente una imagen salió bien encuadrada.
Después de ese encuentro, por alguna razón, vino a mi mente parte de la lectura que estoy haciendo sobre M-Theory, sus once dimensiones y como es necesario incluir la inflación en esa teoría. De pronto, tuve este interesante pensamiento en el que probablemente el universo pasó por cuatro Big Bangs. El primero es el campo del inflatón, la rápida expansión del universo cuando pasó de un falso vacío con alta energía hacia un vacío real de baja energía, a través de un túnel cuántico; esta expansión explica porque vemos el universo isotrópico, plano y homogéneo que observamos. El segundo Bang es el campo del espacio, la expansión del espacio mismo que hoy aun continua, es la causante de que se generara tanta energía, lo cual nos lleva al tercer Bang. El campo de los fermiones, como Einstein nos enseñó, la energía y la materia son equivalentes, entonces toda esa energía se convirtió en materia y antimateria, que cuando colisionaron, generaron el cuarto Bang. El campo electromagnético, cuando materia y antimateria colisionan, se aniquilan en una explosión de pura energía que emite fotones. Y este último Bang es el que percibimos a través del CMB.
Día 290. 19 de junio de 2021
Esta noche me desperté a las cero doscientas horas y después alrededor de las cero trescientas treinta horas. Básicamente tuve que esperar al despertador. Ese comportamiento es señal de que algo me está consumiendo subconscientemente. Mi lectura matutina lo confirma, mi sistema nervioso simpático se encuentra dominante, justo entrando a la zona amarilla.
Ha sido un día tranquilo. Me costó trabajo comenzar a enfocarme, pero logré hacerlo por un tiempo, quizá deba ser más eficiente, pero es un paso a la vez. Mañana sé que lograré dar un paso más hacia la meta. Me siento bien.
Por la tarde me senté un momento en el comedor y observé a los colibríes ir y venir. Vi que un macho estuvo viniendo con frecuencia, así que intenté tomarle fotos. No sé si sea el mismo que se metió al departamento, pero logré capturar sus hermosos colores verdes y anaranjados.
Día 291. 20 de junio de 2021
Hoy he logrado despertar en completo balance, mi lectura matutina fue un diez, aunque mi HRV sólo fue de cincuenta y ocho. Pero me queda claro que los ejercicios de respiración, en los que abrazo mis factores estresantes, me han ayudado a poder enfrentarlos y actuar al respecto. Eso es lo más importante, finalmente estoy tomando acción.
Anoche ya algo tarde llegó una visita inesperada y decidió quedarse a dormir, así que lanzó una llave de tuercas a mi plan dominical. Pero debo reconocer que es bastante agradable levantarme a preparar el desayuno para alguien más. Tuvieron que pasar seis años desde el día que vinieron a instalarla, pero finalmente hoy mi sobrino me pidió que le enseñara a jugar billar.
Por un momento estuvimos viendo a los colibríes y llegaron cinco. Dos machos y tres hembras. Uno de los machos es muy dominante. Cuando llega, prácticamente quita a todos del alimentador, sin importar que hay lugar para todos. Dos hembras comían juntas con frecuencia. Es muy interesante observarlos y ver sus interacciones. Cuando estuvo estudiando la Teoría de la Evolución por Selección Natural, siempre me preguntaba cómo hizo Darwin para darse cuenta de tantas cosas. Para él fueron los pinzones en las islas Galápagos, para mí creo que serán los colibríes en el balcón de mi Fortaleza de la Soledad. Ahora lo comprendo, es fascinante observar estos grupos de aves y tratar de descifrar su comportamiento.
Ya por ahí del mediodía nos fuimos a las visitas. Comí con mis papás y luego visité a mis abuelos. Mi tía que vive en Tijuana ha estado de visita y aproveché para platicar con ella. Siempre me pregunta “¿Y tu princesa?”. Recuerdo la primera vez que me lo preguntó, quizá tenía un par de meses de haberme dejado y me puse a llorar. Hoy finalmente le dije “Tía, creo que es momento de que la olvides, porque ella ya se olvidó de nosotros.”
Me preguntó cómo había pasado y le expliqué que mi mayor muestra de amor es asegurarme de no volver a perturbar su existencia. Dejarla ser feliz con quien ella eligió. Siempre se sorprenden por mi “sacrificio”. Pero para mi no lo es… simplemente, es la mayor muestra de amor… como con los colibríes… simplemente amarlos en silencio y dejarlos ser libres. Le dije a mi tía “Al final, los tontos hacen cosas que no les gusta hacer y sufren su vida entera porque piensan que es necesario o que es su deber. Las personas inteligentes hacen lo que aman hacer y disfrutan su vida, hasta cierto punto. Pero los genios aprendemos a hacer alegremente lo que es necesario.”
Por alguna extraña razón salió a tema los vuelos en globo y recordé un viaje en particular, justamente porque con mi madre platicaba sobre esa persona. Nada de lo originalmente salió, pero fue un gran domingo en familia.
Día 292. 21 de junio de 2021
Hoy me desperté cerca de las cero cuatrocientas horas y me volví a dormir. Cuando sonó el despertador, creo que estaba a la mitad de mi sueño profundo porque me desperté bastante agitado. Creo que eso afectó gravemente mi medición matutina. Creo que tengo que levantarme en cuanto me despierte naturalmente. Experimentaré con eso.
Hoy es el primer día del verano en el hemisferio norte y eso es señal de que esto está por terminarse… afortunadamente. Algunos dirán que el primer día del verano fue ayer, pero eso es incorrecto. El solsticio (del latín solstitium, sol detenido) ocurrió a las cero trescientas treinta y dos horas Universal Time Coordinated. Eso significa que fue a las dos mil doscientas treinta y dos horas, hora local, del veinte de junio, por lo tanto, el primer día del verano es hoy. Lo cual me lleva a mencionar un par de mentiras que la gente suele repetir sin darse cuenta.
Una es “en el verano los días son más largos”. ¡Falso! En el verano los días son más cortos. Si el primer día del verano es el día más largo del año, entonces, por consecuencia, cada siguiente día del verano es más corto. En invierno los días son más largos.
La otra es “el sol siempre sale por el Este”. ¡Falso!, a menos que vivas justo sobre el ecuador, porque en cualquier otra latitud norte o sur; el Sol sólo sale por el Este dos días al año, en los equinoccios (del latín aequinoctium, noche igual). Cualquier otro día, el Sol sale más al norte (primavera – verano) o más al sur (otoño – invierno). Lo interesante en este caso es que el último día de la primavera y el primer día del verano, el Sol sale exactamente por el mismo punto, aquí desde donde yo lo fotografío es sesenta y cinco grados dirección Este-Noreste. Justo por eso se llama solsticio, porque es el momento en el que el Sol se detiene y comienza su regreso hacia el ecuador.
Día 293. 22 de junio de 2021
A penas dormí como cuatro horas, no me desperté a la mitad de la noche, pero definitivamente me siento bien. Mi lectura matutina fue mejor, aunque mi sistema nervioso parasimpático está muy dominante, en el límite de la zona verde.
Hace casi tres años decidí cerrar todas mis redes sociales, después la revista me obligó a abrir Instagram. Hoy he decidido abandonarla por las mismas razones, así que este será el lugar exclusivo donde colocaré las últimas once semanas (cuarenta y dos a cincuenta y dos) de este proyecto. Simplemente quiero desaparecer y ser olvidado. Como dijo Maximus Decimus Meridius “Forget you ever knew me, and never come back here again”.
Hoy terminé de leer el trigésimo libro, uno más y empataré la marca. Parallel Worlds fue escrito diez años después que el libro anterior que leí. Al leerlos uno tras otro, encontré varias similitudes, lo cual es comprensible. Pero este libro se centra más en la predicción de M-Theory sobre el multiverso. Mi parte favorita fue la tercera sección, justamente donde habla sobre las especulaciones con relación a la muerte del universo. Y cómo futuras civilizaciones inteligentes pueden utilizar el hiperespacio para escapar a un universo paralelo donde puedan sobrevivir. Como dijo Weinberg “El esfuerzo por comprender el universo es una de las pocas cosas que eleva la vida humana un poco por encima de la farsa y le da algo de la gracia de la tragedia”.
Otra cosa que me agradó bastante de este libro es que finalmente comprendí con claridad decoherencia cuántica. En palabras mundanas, dos partículas o, incluso átomos, están en coherencia cuando sus ondas de probabilidad vibran exactamente al mismo ritmo. Es decir, con la misma frecuencia, con la misma amplitud, con la misma energía, etc. Por el contrario, son decoherentes cuando esas ondas de probabilidad comienzan a vibrar desfasadas. El problema con la coherencia cuántica es que es sumamente frágil, porque cualquier interacción de las partículas con su entorno u otras partículas, las hace decoherentes, es decir, alteran su onda de probabilidad.
Este entendimiento me llevó a la analogía que me gustaba hacer con ella; decirle que estábamos enlazados cuánticamente porque si importar que estuviéramos en extremos opuestos del espacio-tiempo, yo seguía sintiéndola, aún vibrábamos al mismo ritmo… pero un día ella interactuó con otra “partícula” … y nuestro enlace cuántico se rompió. Ya no me siente. Ya no la siento… ya somos decoherentes… separados para la eternidad.
Día 294. 23 de junio de 2021
Hoy me desperté de un sueño muy extraño, ella estaba ahí. Miré el reloj y eran las cero cuatrocientas veintiocho horas. Desperté un tanto agitado y me quedé en la cama hasta que sonó el despertador dos minutos después. Al menos esta noche logré dormir sin interrupciones.
Mientras contemplaba el amanecer ella vino a mi mente, son pensamientos que encuentro difíciles de combatir. Es momento de usar la táctica Power Tens.
Tengo esta relación de amor-odio con las nubes; las amo durante el día, pero no tanto durante la noche. Pienso en la dispersión de la luz y todos los fenómenos que ocurren simultáneamente a mi alrededor. El viento sopla, los colibríes vuelan, los pájaros cantan, yo observo y escucho y mi cerebro procesa todas esas estimulaciones. También pienso que en alguno de los múltiples universos… hay una versión de mí que sigue en la cama abrazado a ella, al amor de mi vida… Al menos uno de nosotros logró ser feliz en este universo. En la vida real, me han dicho, uno tiene que abandonar lo imposible y adoptar lo práctico. Pero, basado en las leyes de la física, a mi me gusta pensar que lo que no está prohibido; es mandatorio.
Después salió el Sol o, al menos, su silueta y pensé en la masiva bola de plasma que nos da energía. Vino a mi mente que siempre nos enseñan los tres estados de la materia: sólido, líquido y gaseoso; irónicamente, el estado más abundante de la materia en el universo es el plasma.
Por cierto, ¿alguna vez han notado que el momento en que hace más frío es justo antes del amanecer? De eso puedo escribir otro día, por ahora creo que adoptaré el seudónimo de “Minus Forty”, because I am cool either way… if you know what I mean.