Esta semana comenzó con una lluvia inesperada que me permitió capturar la fotografía 106. La imagen de una calle húmeda, siempre me produce una profunda nostalgia. Es una de mis imágenes favoritas. A veces hay detalles que no puedo notar a simple vista y las fotografías me dan la oportunidad de percatarme de esos pequeños detalles que hacen la gran diferencia.

La fotografía 107, aparentemente, es muy sencilla. Sin embargo, tiene una historia detrás. Sí, me costó trabajo equilibrar los cubiertos y los botes pero esa no es la historia. Mientras jugaba con los cubiertos; una amiga mencionó que no sabía cómo decirle a una persona que ya salía con otra. Su motivo: “No quiero lastimarlo”. Entonces yo le dije que de cualquier forma él se sentiría lastimado, así que lo menos que podía hacer por él; era ser completamente honesta. Recuerdo que al final dije: “Lo sé porque lo hicieron conmigo”. Y fue entonces cuando llegó a mi mente un recuerdo… ese recuerdo de que eso mismo que hacía con los cubiertos; era lo que hacía muchos años atrás. El título de la fotografía es en honor al origen de ese recuerdo.

La fotografía 108 es un experimento fotográfico en una noche de ociosidad y pereza creativa. Sin embargo, el resultado me agradó por todos los elementos que saturan la fotografía. Pero hay un detalle en particular que me encanta. No cabe duda que el sábado se inundó de alegría mi corazón, por diminuto que haya sido el momento.

El tránsito de la ciudad a ha sido más benévolo por las mañanas y eso ha permitido que salga más tarde de casa. El miércoles manejando hacia el trabajo me encontré la postal que capturé en la fotografía 109. Una imagen meramente documental de mis días.

Me encantan las flores y hay unas en particular que me hacen pensar en alguien pero porque no le gustan. Desde la segunda clase de fotografía macro, llené mi casa de flores. Esos pétalos que retrato en la fotografía 110, son los primeros que cayeron. El nombre lo dice todo. La fragilidad y decadencia de los pétalos contrastada con la grandeza que evoca el fondo, no son un accidente.

La fotografía 111 me encantó. Es una fotografía sencilla pero aquellos que conozcan mis gustos entenderán a lo que se refiere; los demás pueden interpretar lo que se les dé la gana.

“I will forsake the life I had before, so I may perform my duty as long as I am needed.”

La fotografía 112 es mi Noche Buena. Tan buena como cualquier otra en la que puedo disfrutar de mis más grandes vicios (después de publicar esto jugaré Gears of War 4).

 

106/365 Resplandor. Cuautitlán, Estado de México, México. 18 de diciembre de 2016, 18:51 hrs.

f/5.6
1/25 sec.
ISO-1600
16 mm
SONY ILCE-6000
107/365 M. Naucalpan, Estado de México, México. 19 de diciembre de 2016, 22:41 hrs.

f/4
1/60 sec.
ISO-1600
16 mm
SONY ILCE-6000
108/365 Salto Cuántico. Cuautitlán Izcalli, Estado de México, México. 20 de diciembre de 2016, 22:43 hrs.

f/5.6
1/3 sec.
ISO-200
18 mm
Nikon D7100
109/365 Sólo Sigue. Naucalpan, Estado de México, México. 21 de diciembre de 2016, 06:51 hrs.

f/4
1/160 sec.
ISO-1600
16 mm
SONY ILCE-6000
110/365 Esquirlas De Un Adiós. Cuautitlán Izcalli, Estado de México, México. 22 de diciembre de 2016, 23:04 hrs.

f/8
1/60 sec.
ISO-100
90 mm
Nikon D7100
111/365 DBNO. Cuautitlán Izcalli, Estado de México, México. 23 de diciembre de 2016, 21:25 hrs.

f/7.1
1/60 sec.
ISO-100
26 mm
Nikon D7100
112/365 Noche Buena. Cuautitlán Izcalli, Estado de México, México. 24 de diciembre de 2016, 19:53 hrs.

f/11
1/25 sec.
ISO-1600
18 mm
Nikon D7100

 

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